Decir la verdad.
Nada divierte más a periodistas e internautas que atrapar mentirosos. Si intentas retorcer la verdad para que se adapte a tus intereses, tarde o temprano se descubrirá y el resultado será peor. Tú empresa debe ser sincera, confiable, honesta. Y tu gabinete, también.
Decidir las mejores herramientas para mejorar tu marca.
¿Y cuándo todo va bien? Conociendo tu empresa y el estado actual de los medios de comunicación, un agente de Prensa te aconseja sobre la forma más eficiente de lograr tus objetivos.
Establecer buenas relaciones con los medios de comunicación.
Los buenos agentes de Prensa conocen a los medios y a los periodistas principales relacionados con el sector de cada uno de sus clientes. Este contacto se forma con años de trabajo honrado que ha sido beneficioso para ambas partes.
Esa relación de confianza y complicidad con los periodistas, es la que le abre las puertas a tu negocio.
Mejorar la percepción social de tu empresa.
Todo el talento y las habilidades del agente de Prensa deben trabajar para mejorar lo que el público opina de tu negocio. Se tienen que ganar el aprecio social. Y para ello deben difundir tus valores y hacer comprensible tu mensaje. Para que tu negocio crezca, no basta con ser bueno, debes asegurarte de que la gente lo sepa.
Detectar problemas y anticipar tendencias.
Un agente de Prensa es los ojos y oídos de tu empresa en lo relativo a tu público objetivo y los medios de comunicación. Aunque no son infalibles, sí suelen detectar los problemas más comunes antes de que ocurran. Además, tienen un ojo crítico que les ayuda a anticipar los cambios de tendencias y modas. Su valor aumenta cuando, además, se saben adaptar rápidamente a estas variaciones.
Minimizar el impacto de las crisis de reputación.
En los momentos problemáticos, un agente de Prensa hace todo lo posible por minimizar el impacto negativo de estos en tu marca y tu reputación. En una situación delicada una mala gestión de la comunicación puede hacer que todo se desmorone, por eso es imprescindible contar con un gabinete profesional que esté a la altura de las circunstancias.